Cuando un desconocido se acerca a nosotros en una calle oscura, experimentamos miedo: una respuesta a una amenaza externa, clara y no conflictiva o, por el contrario, cuando sentimos miedo sin una amenaza clara, es muy posible que experimentemos ansiedad: una respuesta a una amenaza interna, desconocida, ambigua o conflictiva.
Todos experimentamos ansiedad de vez en cuando, en dosis bajas y adecuadas, la ansiedad se considera eficaz y nos permite prepararnos para situaciones críticas o amenazantes como un examen, el abandono de la pareja, etc. Sin embargo, cuando la ansiedad surge en dosis altas y en ausencia de un factor amenazante real, puede afectar significativamente la calidad de vida.
Los investigadores de la maestría en Psicología clínica muestran como la ansiedad suele expresarse a nivel emocional (sensaciones de miedo, nerviosismo, etc.) y en síntomas físicos como sudoración, palpitaciones, etc. Los síntomas emocionales y físicos pueden provocar un deterioro temporal en los procesos de pensamiento y percepción, que se manifiesta en confusión, dificultad para concentrarse y dificultades para procesar la información ambiental.
El trastorno de ansiedad se refiere a situaciones en las que diversos síntomas de ansiedad aparecen con frecuencia y perturban la vida cotidiana. Los trastornos de ansiedad son extremadamente comunes (una de cada cuatro personas sufrirá al menos un trastorno de ansiedad a lo largo de su vida) y actualmente existen numerosas técnicas terapéuticas diseñadas para facilitar el manejo de la ansiedad, con considerable éxito.
¿Cuáles son las causas de la ansiedad?
Los trastornos de ansiedad han ocupado a psicólogos y psiquiatras desde los inicios de la psicología, en la época de Freud, los trastornos de ansiedad se explicaban mediante teorías biológicas y psicológicas, mientras que hoy en día se cree generalmente que la mayoría de los trastornos de ansiedad son causados por una combinación de factores biológicos y psicológicos.
Factores psicológicos:
Diversos enfoques psicológicos han ofrecido explicaciones para los trastornos de ansiedad:
- Causas según el psicoanálisis
: Este enfoque considera que la ansiedad surge de conflictos internos en la psique humana: un deseo o impulso prohibido amenaza los valores y la conducta moral de la persona, pero al ser inconsciente, se manifiesta como ansiedad.
- Factores según la psicoterapia cognitivo-conductual:
Los enfoques conductuales consideran la ansiedad como producto de un aprendizaje ineficaz, en el que la persona aprende a responder con ansiedad a estímulos neutrales. Los enfoques cognitivos enfatizaban la tendencia de la persona ansiosa a evaluar los peligros de forma exagerada e irreal. Hoy en día, estos enfoques consideran la ansiedad como el resultado de una combinación de factores conductuales y cognitivos.
Factores genéticos:
Los estudios indican la importante influencia del componente genético, ya que aproximadamente la mitad de las personas que padecen trastornos de ansiedad tienen un familiar que también la padece.
- Factores biológicos:
Muchos factores biológicos están relacionados con los trastornos de ansiedad, como un sistema nervioso hipersensible y la desregulación de la acción de algunos neurotransmisores, generalmente la serotonina, la noradrenalina o el GABA.
Tipos de Trastornos de Ansiedad
El DSM ofrece varios trastornos de ansiedad principales:
- Trastorno de Ansiedad Generalizada:
Una sensación persistente de preocupación ante diversos tipos de situaciones negativas que pueden ocurrir. La preocupación se convierte en uno de los componentes dominantes de los sentimientos del individuo.
- Ansiedad social:
se caracteriza por timidez y miedo a las situaciones sociales, en algunos casos, se manifiesta evitando estas situaciones. Por ejemplo, el miedo escénico.
- Fobia: miedo extremo a diversas situaciones y objetos. Por ejemplo, miedo a las alturas o miedo a los animales.
- Trastorno de pánico:
ataques recurrentes de miedo intenso. Los ataques se acompañan de una reacción física que incluye, por ejemplo, sudoración, temblores y taquicardia.
- Trastorno de estrés postraumático (TEPT):
Síntomas de ansiedad que aparecen tras un trauma, algunos ejemplos incluyen pesadillas, irritabilidad, inquietud constante y flashbacks.
- Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC):
Pensamientos intrusivos que provocan ansiedad, acompañados de acciones repetitivas diseñadas para intentar calmarla, por ejemplo, el miedo a los gérmenes que lleva a lavarse las manos repetida y excesivamente.
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Problemas de ansiedad específicos en niños: por ejemplo, miedo a ir a la guardería o al colegio, o ansiedad por abandono delante de los padres.
Tratamiento de la ansiedad
La prevalencia de los trastornos de ansiedad, tanto en adultos como en niños, ha impulsado el desarrollo de diversos métodos para el tratamiento del cuerpo y la mente, que han demostrado ser significativamente eficaces. Recomendaciones realizadas por los estudiantes e investigadores de la maestría en Psicología clínica.
- Terapia cognitivo-conductual:
La terapia cognitivo-conductual es un tratamiento a corto plazo que se centra en los síntomas de ansiedad, durante este tratamiento, se aprenden técnicas para auto-consolarse, identificar suposiciones falsas, usar la imaginación, etc. Paralelamente al aprendizaje de estas técnicas, se va exponiendo gradualmente a los factores o situaciones amenazantes.
- Consulta psiquiátrica:
El tipo de tratamiento farmacológico se determina según el tipo de trastorno, su gravedad y la presencia o ausencia de otros trastornos mentales. Los tratamientos más comunes para este trastorno son los ansiolíticos del grupo ISRS, las benzodiazepinas, etc.
- Psicoterapia
: Los tratamientos cognitivo-conductuales y farmacológicos se centran en los síntomas de ansiedad, pero en ocasiones deben considerarse en un contexto más amplio (crisis, periodo de la vida especialmente estresante, trastorno de la personalidad, etc.), y en estos casos se puede combinar una psicoterapia a largo plazo como la terapia psicodinámica.
